Firme como una tuerca, allí permanece desde hace treinta años, para nuestra tranquilidad la geometría es sólo de superficie, hacia las profundidades respeta los patrones conocidos con arabescos incluido, y no se ve asomar a Saturno, salvo que su testa exagonal sea invisible en todas la longitudes de onda, o tal vez sí, tal como Goya lo imaginó.
Sin embargo "Ahora que podemos ver ondulaciones y rasgos circulares en lugar de gotas en el hexágono, podemos empezar a tratar de resolver algunas de las preguntas sin respuesta acerca de una de las cosas más extrañas que hemos visto en el sistema solar", dijo Baines.
Como se trata de nubes, si bien diferentes a las de nuestro medio, pero nubes al fin, agrego la imagen siguiente, para hacerles recordar a los que están acostumbrados a contemplarlas, las formas que muchas veces estas se permiten como dotadas de razón.
Salvo que se trate de:
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